miércoles, 12 de septiembre de 2012

I'VE BEEN TAGGED!

En una parte del capítulo "Los tres niveles de cultura", Schein menciona que de acuerdo a McGregor, cuando las personas son tratadas constantemente bajo determinados supuestos básicos, eventualmente comienzan  a comportarse en concordancia con dichos supuestos, de modo que su mundo sea estable y predecible. Esto me hizo reflexionar sobre ciertos ejemplos en los que tratamos a los demás como creemos que son o deberían ser. 


Por ejemplo, podríamos decirle a un niño que es incapaz o incompetente en todo lo que hace... al pasar el tiempo, el niño no solamente creerá que no es capaz, sino que actuará de acuerdo a dicha creencia para demostrarse que los demás tienen razón. Esto se convertiría en una profecía autocumplida.

Pero, si por el contrario, empoderamos a un niño diciéndole que tiene el poder de alcanzar cualquier meta que se proponga, la visión que tendrá ese niño de sí mismo será positiva y segura; y actuará con firmeza obteniendo buenos resultados.

Podemos etiquetar a las demás personas e incluso hacer que nuestras creencias (positivas o negativas) tenga algún efecto en ellos. ¿Qué tan conscientes estamos de que etiquetamos a las demás personas? ¿Con qué frecuencia lo hacemos? ¿Cómo influyen nuestros supuestos básicos en otras personas o sociedades?

1 comentario:

  1. Buenas preguntas Blanca. Las etiquetas expresan prejuicios y generalizaciones. Pienso que las usamos con mucha frecuencia aún cuando no las verbalizamos. Y eso nos aleja de las personas, nos hace sentir superiores o mejores que ellos de alguna forma.

    ResponderEliminar