miércoles, 27 de febrero de 2013

Ayuda no solicitada...


Historia de ayuda no solicitada que haya resultado exitosa
Hace unos cuantos meses hice prácticas en Recursos Humanos. La empresa me encantaba, poco a poco fui aprendiendo todo el proceso de reclutamiento (entré sin saber absolutamente nada) y entre más sabía del proceso, empezaba a encontrarle posibles mejoras.
El proceso era el siguiente:
1)La persona tenía entrevistas con el departamento de RH,
2) Entrevista con el Jefe, si hasta aquí era un buen candidato…
3)Se mandaba a investigación laboral
4)Se citaba a la persona para realizarle estudios médicos e historia clínica si todo resultaba bien hasta aquí…
5) Se le realizaba un estudio socioeconómico y finalmente…
6) Se citaba a la persona para que entregara documentación y firmara su contrato.
Se ocupaba un DIA para cada paso antes mencionado, lo cual lo hacía un proceso bastante largo, no solamente para el departamento de recursos humanos, sino también para la persona que se encontraba en proceso de selección.

Le propuse al coordinador de Recursos Humanos que nos pusiéramos de acuerdo con los jefes solicitantes y el médico, de modo que cuando un candidato pasara el filtro de RH, tuviera ese mismo día la entrevista con el Jefe, el examen médico y que me dejara a mi todos los datos necesarios para enviarlo a investigación laboral. Es decir, haríamos en un solo día lo que nos llevaba cuatro. Y la persona se evitaría la molestia de ir a la agencia día con día.
Mi jefe aceptó la propuesta y la implementamos con bastante éxito. Había que tener bastante coordinación para el proceso, ya que cada filtro requería el “visto bueno” de los involucrados (RH, El jefe, el médico) para continuar con el proceso; de modo contrario, el candidato se quedaba en alguna parte del proceso (lo cual también era un ahorro de tiempo para nosotros).
Este cambio requirió no solo el apoyo de mi jefe, sino la buena disposición de otros departamentos, de modo que todos se vieran beneficiados.


domingo, 24 de febrero de 2013

CONTRACTING OVERVIEW


Poniéndote en los zapatos del cliente o del consultor, ¿Cuáles son las 2 ó 3 fases, intenciones o preguntas que te llaman más la atención y porqué?
Poniéndome en los zapatos del cliente me parecería particularmente importante la primera fase (el primer contacto), en la que se llegan a acuerdo de que se espera de ambas partes. Aquí es un buen momento, previo al contrato, para aclarar cual es el objetivo de cambio y las formas en que éste se vería reflejado.
Desde el punto de vista del consultor, me llaman la atención dos fases: el descubrimiento y la continuidad y evolución. Creo que el descubrimiento debe ser fascinante ya que el consultor se empieza a empapar de lo desconocido, y aquellos que están inmersos (o atorados) en la cultura, tienen la oportunidad no solamente de brindarle un panorama de la situación actual, sino de proponer cambios o ideas que desde su perspectiva podrían mejorar el presente.
La segunda fase (Continuidad y evolución) me parece un gran reto, ya que el consultor debe de promover en la gente la autonomía de avanzar y buscar la mejora continua, lo cual considero de gran valor, pues hace que la gente se responsabilice por sus acciones y promueve la independencia, es decir, que la próxima vez que se presente otro problema no dependan del consultor, sino que tengan el empuje de hacer un cambio por ellos mismos.



Check List #2
Analizando uno de mis contratos: Recuerdo una de mis últimas clases de la universidad, en la que debíamos hacer una intervención clínica a cualquier centro u hospital que nos lo permitiera. Mi equipo de trabajo y yo escogimos un grupo de mujeres con cáncer de mama para impartirles cursos de psicología. A continuación les redacto el contrato que realizamos con la jefa del grupo basándome en el checkList del libro de Peter Block:

1.- Los límites de mi análisis: Nos limitamos a impartir cursos exclusivamente a mujeres que padecían o padecieron cáncer de mama en algún momento y que pertenecían al grupo “Recuperación Total”. No se impartirían talleres a familiares ni a personas externas.
2.- Objetivo del proyecto: El objetivo fue trabajar con temas que ayudaran a las mujeres a recuperar su autoestima, percepción corporal, independencia, así como brindarles información médica sobre su enfermedad, además de otorgarles un espacio para expresar sus miedos, emociones y experiencias.
3.- Tipo de información que busco: Se buscaba que las mujeres se abrieran unas con otras y recibieran soporte emocional durante la etapa difícil que estaban pasando.
4.- Mi rol en el proyecto: Mi rol fue bastante activo, escuchaba e intervenía mediante actividades grupales e individuales previamente programadas.
5.- El producto que entregaré: Al finalizar los talleres y cursos, se les entregó a las participantes una recopilación con la información más relevante de los temas vistos.
6.- Que apoyo y participación necesito del cliente: Necesité mucha apertura y confianza por parte de las participantes.
7.- Tiempo programado: Se acordó que los talleres se impartirían cada sábado con una duración de 4 horas cada uno.
8.- Confidencialidad: Las historias o experiencias personales relatadas durante los talleres no podían ser comentados fuera de la sesión ni con personas ajenas al grupo.
9.- Retroalimentación para mí: Mi equipo y yo regresamos una semana después de finalizado el periodo de talleres y recibimos comentarios positivos acerca del impacto de los mismos.


viernes, 22 de febrero de 2013

SER AUTÉNTICO


¿Cuáles son los dos o tres conceptos que más te atraen, te entusiasman o te intrigan?
Este capítulo me llamó especialmente la atención porque hablar de ser auténtico como una herramienta poderosa para ganar la confianza del cliente. A pesar de que podría parecer que el hecho de ‘complacer’ al cliente sería una buena táctica para obtener su visto bueno, la realidad es que ser auténtico hace que la gente confíe más en nosotros y en nuestra manera de actuar. A fin de cuentas, ¿qué se podría esperar de una persona que finge o miente? Y es precisamente esta certeza de que haremos las cosas de manera correcta es lo que hace que el cliente deposite su confianza en el consultor y colabore con él.
Me llamó la atención la parte de la lectura que dice: “Los clientes son un poco ambivalentes, quieren que te involucres y les ayudes, pero al mismo tiempo desean nunca haberte conocido”. Pienso que esta frase tiene mucha razón, ya que por lo regular el ser humano desea solucionar sus problemas, pero en ocasiones no está del todo convencido en pagar el precio por ello. ¿Podría ser, de alguna manera, nuestro miedo a la verdad lo que nos impida lanzarnos al cambio?
Otra parte de la lectura que me hizo reflexionar fue: “Sabes que tus recomendaciones son buenas y deberían de seguirse, pero no eres responsable de que la maquina no opere en base a dichas recomendaciones y tienes que aceptar ese hecho”, creo que como consultores, debemos de poner nuestro 100% para lograr un cambio, pero hay una parte del cambio que no depende de nosotros y hay que saber reconocer qué está en nuestras manos y qué no para evitar frustraciones.



¿Cuál es el concepto que te provoca cuestionamientos (puede ser a nivel personal o que te reta o choca con tu marco conceptual)?
Desde mi perspectiva, ser autentico puede ser un gran riesgo y al mismo tiempo un gran alivio. Por un lado, podría suceder que ser honesto y directo no sea agradable para la otra persona y prefiera retirarse antes de comenzar la partida, no obstante, el hecho de que nos acepten tal cual somos nos brinda la libertad de actuar de acuerdo a nuestros principios y con el apoyo total de la otra parte que colabora, lo cual es maravilloso.
Siento que es importante cuidar el cómo decir las cosas y saber expresar de manera pertinente lo que deseamos, que podemos ofrecer y lo que esperamos obtener.
Hace un par de días presencié una entrevista de trabajo, en la que la chica entrevistada le comentaba a mi jefa que solamente estaba buscando un trabajo temporal en lo que le entregaban su título y cédula, ya que sin ellos no podía laborar. Me sorprendió la honestidad y la seguridad con la que dijo lo que podía dar a la empresa y sus motivos, ya que probablemente mucha gente hubiera omitido la verdad para tener más posibilidades de ser contratados. La chica fue contratada, y creo que fue lo más conveniente para ambas partes saber cuánto durará esta relación laboral desde un principio.


lunes, 18 de febrero de 2013

Un desconocido con permiso para indagar...


Esta clase me pareció bastante amena; el grupo tuvo la oportunidad de exponer sus dudas y realizar preguntas en un ambiente agradable y con bastante confianza al Consultor Carlos Nieto. Una de las preguntas que me llamó bastante la atención fue la de si era más fácil ser consultor interno o externo. Creo que, efectivamente como mencionaba el Lic. Carlos, ser un consultor externo es más fácil debido a que puedes cuestionar con más apertura, es decir, tienes permiso de preguntar, dudar, indagar sobre la cultura que apenas estás conociendo, sin que los demás se sientan ofendidos. Siendo consultor externo, no sabes los conflictos que hay entre las personas, a quién debes de hacer ciertas preguntas y a quien no, sin temor a herir susceptibilidades. Sin embargo, estando ya inmerso en una cultura, sabes que disputas hay entre los trabajadores y el jefe, que el jefe no soporta críticas, que temas son tabú etc, lo cual te limita en la intervención. Creo que esta aportación fue la que más me hizo reflexionar, ya que también aplica en otros aspectos de la vida: ¿Qué es más sencillo preguntar sobre religión a personas a quienes apenas estás conociendo? ¿o preguntar sobre religión a personas que sabes de antemano que son cerradas en cuanto a ese tema y un mínimo cuestionamiento sobre su religión lo tomarán como ofensa?


FLAWLESS CONSULTING CAP. 1 Y 2


¿Cuáles son los cuestionamientos que me atraen más o me están abriendo los ojos?
Me gustó mucho la frase que dice “Cada vez que das un consejo a alguien que está en condiciones de tomar la decisión, usted está consultando.” Esto me lleva a pensar que el simple hecho de intervenir con la intención de realizar una mejora, ya se trata de una consultoría. Antes de leer el libro pensé que para consultar se necesitaba de muchas habilidades o conocimientos; considero que en ocasiones, las personas lo que más necesitan es ser escuchadas y obtener una opinión externa, ya que cuando se está inmerso en el problema las cosas no se ven con la misma claridad. Creo que el consultor puede ir mejorando su técnica con el paso del tiempo y que no necesita ser perfecto desde el inicio; no obstante, creo que debe de tener la habilidad de establecer relaciones interpersonales desde el principio para generar un clima de confianza para empezar la consultoría.
Me llamó mucho la atención que el autor mencione que “Como consultor, si tu cliente te pide algo, no necesariamente tienes que obedecer”, es decir, que se puede cuestionar y en la consultoría no aplica la trillada frase de “el cliente siempre tiene la razón”, ya que en este caso, hacer la voluntad del jefe limitaría demasiado la intervención del consultor, ya que se estaría restringiendo a un solo punto de vista.

¿Qué me sorprende? ¿Porqué?
Me sorprendió bastante el parecido que tiene el perfil del consultor al rol de un terapeuta. Ambos deben de saber establecer relaciones con las personas y desarrollar la empatía. Además, el consultor, al igual que el terapeuta no marca un camino a seguir, sino que deja a la persona tomar la decisión que crea más adecuada a su situación.

Cap. 2 ¿Cuál es tu rol típicamente en situaciones de ayuda/consultoría?
Hace tres años tuve la oportunidad de dar terapias grupales a personas con algún tipo de adicción. Me di cuenta de que mis terapias funcionaban más mientras yo hablara menos; es decir, las personas necesitaban compartir sus miedos, tristezas, dolores más profundos, con sus compañeros y con alguien en quien confiaban debido a su conocimiento del tema (en este caso el terapeuta). Me asombraba ver cómo al ser empática y escuchar con atención, las personas se abrían cada vez más, eran más confiados y el compañerismo iba en aumento. Podría decir que mi rol en situaciones de ayuda se basa en hacer sentir en confianza a la persona, ponerme en sus zapatos, escuchar con interés, preguntar sobre aquellos aspectos que me llaman la atención y dejar que la persona busque soluciones por sí misma.


¿Qué te dice tu manera de actuar de tus supuestos acerca de una relación de ayuda?
Creo que un supuesto que tengo sobre una relación de ayuda es “Cada persona sabe resolver sus propios problemas de la mejor manera”, posiblemente por esto evito dar soluciones o sugerir alguna manera de actuar frente al problema de otra persona, ya que cada individuo tiene sus propios pensamientos y recursos para resolver sus dificultades de la manera que le parezca más apropiada. No obstante, considero que todas las personas necesitamos sentirnos apoyadas y escuchadas.